El ajedrez, así como es un deporte intelectual, es un juego en el que se pone en práctica la capacidad de estratega que uno tiene. Cada acción invita a una reacción por parte del rival, quien no tendrá la menor conmiseración con su oponente para acabar con su rey.
Sobre un ordenado escenario isométrico las historias que pueden surgir son más que simples duelos, son puertas que nos pueden conducir a situaciones inverosímiles y lugares fantásticos, en donde fichas blancas y negras se convierten en un marco que nos acompañarán a lo largo de las historias.
Cuarenta cuentos tácticos es una reunión de relatos en donde el ajedrez desarrolla un vínculo narrativo que se extiende más allá de estas páginas.