ISBN 978-612-4373-73-2

Reseña

La actividad turística humana de carácter económico compromete cada vez a un mayor número de sectores. Entre ellos, uno de los más importantes es la academia compuesta por los investigadores, docentes, y estudiantes de Turismo y de carreras afines. Quienes somos parte de esta comunidad no solo tenemos el llamado de estar acorde a los cambios en las necesidades de consumidores y empresas relacionadas al rubro. También debemos encargarnos de impulsar esa evolución a través de investigaciones que propongan nuevos atractivos y destinos turísticos. Con la finalidad de brindar nuevas experiencias, nuevos matices y alternativas diferentes, que a la vez, faciliten el esparcimiento y recreación y generen un encuentro con la naturaleza, con las comunidades que albergan invalorable acervo cultural y originales rituales entre místicos y sagrados.
En consecuencia, observamos que los últimos años de desarrollo turístico mundial son testigos del nacimiento de una nueva corriente turística que cada día avanza vertiginosamente en cada uno de los continentes y, que en nuestro país, empieza a consolidarse paulatinamente. Nos estamos refiriendo de manera concreta al geoturismo, que sin ser del todo novedoso (ya que griegos, romanos y fenicios se interesaron por las maravillas geológicas de su época), viene impactando positivamente, tanto entre sus promotores, como en los usuarios del mismo. Es ahora una de las opciones más acertadas para la necesidad del ser humano de encontrarse con la naturaleza intima de nuestro planeta, explicarla, interpretarla y relacionarla con su entorno natural y cultural.

Por ello, elegimos este tema como objeto de investigación para el desarrollo de un trabajo académico que nos permitió obtener el grado de doctorado en la Universidad San Martín de Porres. En ese entonces, una de nuestras motivaciones también era solucionar la problemática económica que vienen afrontando los pobladores de la provincia de La Unión por la ausencia de fuentes de trabajo y ausencia de inversiones, todo lo cual genera el deterioro en la calidad de vida y un fuerte proceso migratorio. Por ello prefiguré que esta maravillosa geografía era una posibilidad de aprovechamiento de los denominados geositios para el establecimiento de geoparques. Una buena alternativa, ya que involucran un conjunto de actividades complementarias al rubro turístico como son: investigación científica, educación y protección del entorno natural.
Posteriormente, en nuestro trabajo en la docencia universitaria observamos que los estudiantes requerían un texto que les ofreciera la teoría y la descripción de procedimientos para el diseño de propuestas que identifiquen nuevos destinos turísticos. Así comenzamos a emprender la adaptación de los estudios realizados y la escritura de este texto que por razones didácticas dividimos en dos partes.
En la primera parte ofrecemos los fundamentos teóricos que podrían sustentar un proyecto de geoparque y que servirían para construir una ruta metodológica que guíe el diseño de un proyecto, que bien puede ser una investigación universitaria de pre o post grado, o un proyecto viable para una entidad del gobierno municipal, regional o nacional si es que el estudiante universitario ya se encuentra en el ejercicio de su profesión. En esta parte el estudiante lector encontrará antecedentes históricos y teóricos de la categoría geoparque así como un breve recuento de cómo se ha desarrollado esta alternativa en el Perú. También podrá hallar aspectos de la ruta metodológica como la forma y los criterios para delimitar la muestra y el tipo de investigación.
La segunda parte ofrece el estudio de caso de la provincia de La Unión, donde se demuestra cómo se debe proceder al sustentar la propuesta de creación de un geoparque. Para seleccionar la zona se consideró que las particulares condiciones geográficas y geológicas, representan un sólido argumento para promover el geoturismo en una escala importante. Con ese fin se hace necesario, en primer término, seleccionar aquellos espacios que por su propia naturaleza constituyan auténticos modelos de procesos geológicos. Para lo cual, indudablemente, el territorio andino, de norte a sur, resulta ser el más adecuado, sobre esta base se hizo necesario aplicar la normatividad específica para dar a un espacio la categoría de geoparque: disponer de modelos geológicos excepcionales o de gran interés; procurar que estos modelos formen parte de las áreas naturales protegidas o se relacionen a las mismas: representar verdaderos modelos didácticos para el estudio y conocimiento de los procesos geológicos; constituir nuevas alternativas de beneficio socioeconómico para las comunidades vinculadas a los geoparques, cuando estos se orienten al desarrollo de la actividad turísticas (geoturismo propiamente dicho).
El cumplimiento de estas premisas requirió que realicemos un trabajo de campo minucioso donde recorrimos los distritos Cahuana, Alca, Huarcaya, Tomepampa, Churca, Puyca, Alca, Taurisma, Huaynacotas y Pamapamarca y registramos un total de 47 de gesositios. También realizamos un inventario de servicios turísticos asociados al geositio. Todo este trabajo incluyó reuniones y entrevistas donde colaboró la Municipalidad Provincial de La Unión, otras autoridades y los pobladores de la zona.
Fue una ardua labor sustentada en el estímulo que representa para una docente de la Escuela de Turismo proponer a los estudiantes universitarios las herramientas para desarrollar una propuesta real de geoparque. Queremos ofrecerles un modelo de investigación diferente que aporte tanto al conocimiento científico de nuestro país como al desarrollo de las comunidades andinas. Este último aspecto, nos impulsó a buscar un área de trabajo que represente lo más relevante de la geografía peruana, pero a su vez, lo menos conocidos, como es la sub cuenca del río Cotahuasi (reserva paisajística de la Región Arequipa). Un espacio natural que antes de representar una limitación por su desconocimiento y parcial aislamiento, se convirtió en un reto y una expectativa para las oportunidades del turismo a desarrollar en las próximas décadas, tanto en la región sur peruana como a nivel nacional e internacional.
Con estos fines se presenta una revisión minuciosa de la producción bibliográfica (balance de la literatura) referente al tema y espacio seleccionado para la propuesta investigación y aplicación, por su peculiar naturaleza se seleccionaron materiales propios del tema como son: cartas topográficas, cuadrángulos geológicos y fotos satelitales. Durante la fase de trabajo de campo se efectuaron sendos recorridos en el contexto de la sub – cuenca y se procesaron fichas técnicas de registro de geositios que hicieron posible su caracterización, descripción de su entorno natural, verificación del patrimonio cultural asociado a los referidos geositios,
Concluido el trabajo de campo y procesado la información, se ve que la propuesta está justificada por la presencia de componentes geológicos (geositios) de gran relevancia, entre los que destacan nítidamente el cañón del río Cotahuasi, cataratas, bosques de roca, geiseres y aguas termales, volcanes y estructuras geológicas de gran valor y antigüedad. Este entorno natural de gran relevancia, constituido por toda una diversidad de ecosistemas localizados entre los 2 mil y más de 5 mil metros de altitud tiene particulares expresiones florísticas y faunísticas. Patrimonio cultural destacado entre evidencias arqueológicas de miles de años de antigüedad (arte rupestre de Ayahuasi y Charcana), arquitectura precolombina y colonial (Maucallacta de Puica y templo colonial de Tomepampa).
También se desarrolló una propuesta educativa y didáctica, donde no solo se señala las posibilidades de su desarrollo en el ámbito de estudio, sino que también, se sugieren los modelos de trabajo, materiales a emplear y temas específicos de estudio, todo lo cual representa una alternativa metodológica para especialistas en Turismo, ingenierías Geológica, Geográfica y Ambiental, Biología y Ecología, así como formación docente en el área de Ciencia y Ambiente.
En cuanto las posibilidades y perspectivas de desarrollo socioeconómico de las poblaciones vinculadas a los geositios, la alternativa de mejoramiento de la calidad de vida a partir de su incorporación al rubro económico del turismo es indiscutible, previa coordinación, capacitación, puesta en valor de lugares y monumentos a fin de iniciar la promoción e inicio de programas en la línea del geoturismo.
Finalmente, consideramos que este primer acercamiento al espacio geográfico de la sub cuenca del Cotahuasi constituye un aliciente para futuros estudios e investigaciones que deben ser asumidos tanto por académicos en el área del turismo como por entidades estatales como privadas, los cuales redundarán, no lo dudamos, en beneficio directo de los pueblos olvidados de la región andina.