Salvado de las Aguas nos transporta a la depauperada sierra norte peruana de comienzos del siglo pasado, desde donde empieza una travesía en la que aparecen y desaparecen diversos escenarios descritos en clave tragicómica: un oasis de modernidad petrolera en la costa de Piura, un cuartel de frontera en los años cuarenta, los estertores del ferrocarril, la vida de unos estudiantes ochenteros cabalgando entre el ímpetu revolucionario amateur y el descubrimiento de la sexualidad, entre otros.