A los siete años, Iván Dragó es seleccionado en un concurso de invención de juegos entre otros diez mil chicos. A partir de ese momento su vida cambia por completo: sus padres desaparecen en un viaje en globo y él se ve obligado a vivir con su tía hasta que se muda a la ciudad de Zyl con su abuelo, el famoso inventor de juegos Nicolás Dragó. Allí se abrirá para Iván un mundo de aventuras y misterios en el que su propia existencia formará parte de un juego incomprensible. Cuando la vida y el juego se mezclan, todo puede suceder.