La triste realidad, de dos hermanitos, los obliga a abandonar el lugar en el que viven, emprenden un viaje con alguna esperanza.
En el camino, un encuentro circunstancial con una anciana muy humilde pondrá a prueba la nobleza y humanidad de los niños; entonces, se desata una historia muy especial que cambiará el rumbo de sus vidas.
Este cuento enseña al lector, lo importante que es ser desprendido, generoso y solidario con las personas.