Verano de 1886. Sofía Carlota de Alençon, culpable de adulterio, es
encerrada en un sanatorio. La infidelidad femenina es castigada por
ley, la psiquiatría la cataloga dentro de las “insanias morales”. La vida
en el sanatorio, a cargo del psiquiatra Krafft-Ebing, figura referente del
joven Sigmund Freud, está marcada por el rigor y los tratamientos que
pretenden controlar la libido en Sofia con terapias eléctricas, inmersión
en hielo, dosis de morfina.
Sofía Carlota de Alençon, mujer de la aristocracia europea, padece
severas crisis depresivas y buscará en la fe una cura a sus pulsiones
eróticas. Encontrará la muerte años después en el trágico incendio del
Bazar de la caridad.
Esta novela histórica explora el nacimiento del psicoanálisis que
empieza a especular con la “cura del habla”: pacientes que “cuentan
sus cosas” y, al hacerlo, consiguen conjurar sus males más íntimos.
“Mujer Rota” compone, en fin, un esmerado fresco de una época
turbulenta: la III República francesa, la Comuna de París, la espantosa
guerra franco-prusiana.