Leer a Jean D’Carval es adentrarse a la humildad, fantasía, ingenuidad, picardía e inverosimilidad del niño debido a que sus personajes favoritos son los niños, en donde con bastante ingenio propone situaciones que hacen meditar a éstos y a los lectores. Juega con el lenguaje, proponiendo al lector un diálogo con el autor. Sus cuentos mágicos maravillosos están actualmente en el boom que él ha instaurado “Confesiones de un cerdo” que hasta la fecha nos hace entrega de cuatro confesiones. ¿Y pensar que los chanchos volaban no? El presente texto consta de cuatro cuentos: El zarquito, Satu, Cuando éramos niños (Del libro Confesiones de un cerdo) y Tobby.
Sin duda, los niños tendrán un motivo permanente para poder leer siempre.