Un estudio lindísimo de la mitología Huanca es Ouroboros.
En el poemario que presenta Jean D’Carval comienza a dar un mayor énfasis a su identidad cultural, asume elementos de pertenencia usando palabras identitarias como: Mantaros, Macchu Picchu, amarus, cóndor, Huallallo Carhuancho, Aulit, Wayra, Quilla, Pacha, Tulumanya y Apo Kon Ticsi Wiracocha fluyendo junto a otras de la “cultura global” como: Danubio, Olimpo, Moiras, Averno, Ananta, Vishnú, Siva, Ouroboros, Tánatos, Hathor y Venus, la Diosa romana del Amor, en esta amalgama, la poesía de D’Carval surge como la llama primigenia de la utopía: “Somos hijos del dios sol./ Tulumanya te engendró/ de colores, alada, infinita./ Generosa. /Utópica.” Escribe D’Carval, señalando el mensaje del amor como la matriz de todas las utopías. Amor e identidad con el propio entorno social y cultural, como signo de pertenencia. (Nicolás Matayoshi)