La logística del comercio internacional es el conjunto de tareas y actividades necesarias para el flujo de mercancías, desde el local del vendedor, también llamado exportador, hasta el local del comprador, también llamado importador, ubicados ambos en países distintos.
Esta actividad tiene características propias que la hacen distinta de una compra local. Las gestiones tienen un nivel de complejidad mayor que, con una adecuada planificación, resulta sencilla.
La necesidad del flujo de productos a través de dos países distintos nace con el contrato de compraventa internacional, el cual es un acuerdo voluntario entre dos partes, con fines de lucro, sobre una mercancía lícita que debe realizar trámites aduaneros. El contrato de compraventa internacional determina las normas bajo las cuales se realizará el traslado de las mercancías.