Una historia se puede entender como una línea recta, tiene un inicio, una parte media y un final. Una línea cortada en dos o más hace que con cada trozo se forme una nueva línea, y por ende una nueva historia cada vez.
En este libro no hay una sola historia, no es una sola línea. Hay muchas, y de cada línea se podrían crear muchas otras porque uno siempre espera saber más de los personajes involucrados, de verlos en nuevas historias, partiendo sus propias líneas en otras nuevas.
Este libro es un símil de varias líneas, a veces rotas, a veces entrecruzadas, y no necesariamente líneas rectas, a veces son curvas llenas de adrenalina y otras, son un espiral del que es muy difícil encontrar el camino de regreso.