Existen importantes iniciativas nacionales, como la que nos brinda el escritor Jim Rodríguez; proyectos que no abundan, aunque existen, y que hoy, gracias al prestigio y pericia del organizador u organizadores, se consolidan y llegan a buen puerto, como es el caso de esta excelente (y no es un exceso de entusiasmo) compilación de cinco relatos que son muy distintos entre sí, que plantean temáticas variadas y que poseen fuerza y personalidad cada cual desde su forma hasta su argumento; sí, las tramas son formidables.
Es brillante la propuesta que, aseguro, disfrutaremos una vez concluida la lectura de esta breve presentación: una antología que reúne los cuentos ganadores y finalistas del concurso «Cosmos», que generó expectativas en su momento y solicitaba textos de autores jóvenes y adolescentes.
Ana María Heiland nos brinda un texto absorbente, muy bien escrito, con una tonalidad poética que hipnotiza y nos conduce con solvencia por sus recovecos. Uno de los mejores cuentos peruanos de ciencia ficción que he leído en varios años, el cual podría aparecer en cualquier antología de lo mejor de este género.
Marco Antonio Yauri propone un relato que juega con el uso que se hace de la ciencia, y mezcla con solvencia lo siniestro con el dilema moral. Ya he tenido el gusto de leer cuentos del autor y es, sin duda, sinónimo de habilidad.
Miguel Ángel Solano presenta un mundo ciberpunk, en el cual hay una investigación de corte policial y mantiene muy bien el suspenso.
Gerson Smith Rivas juega con la realidad y se adentra en las mentes lectoras; una ficción ágil que conmueve e inquieta al mismo tiempo.
Diana Doris Esquivias muestra una narración envolvente que mezcla romance, drama y ese encanto que puede tener el presente género.
Argumentos interesantes, desarrollos atractivos, finales sorpresa, giros de trama. Calidad es la palabra que define a este valioso cuaderno. Por favor, paren de leerme e inicien con él.
Carlos Enrique Saldívar