Son pocas las novelas que tienen como personaje central al desierto; este mar de arena, de forma singular, estará presente en casi toda la trama, moviéndose sinuosamente como una presencia omnisciente que por momentos apabulla a los personajes, quienes de cierta manera se rendirán y someterán ante su omnipotencia y magnanimidad. En esta novela, mención honrosa en el Concurso de Novela Breve Cámara Peruana del Libro 2013, el autor con pulso firme narra en clave de ficción las peripecias de uno de los tantos bandoleros, montoneros, que asolaron a principios del siglo XX la región norte del país, y en particular a los pueblos del bajo Piura. Pero también encontramos una subtrama, algo que yace ahí soterrado, moviéndose en todo el escrito y será el lector quien despeje sus dudas, en esta novela de trama atrapante y cautivante.