El libro Franco por Franco está compuesto por intereses de carácter personal que buscan perennizar la memoria de un ser querido, pero además encuentra el camino de interesar al lector haciendo que la historia no sea solo personal, sino que resuene en la memoria colectiva, puesto que la pérdida del padre es un hecho social objetivo y estadísticamente recurrente.
El tono coloquial seleccionado para contar la historia es muy efectivo para capturar la atención popular. No se abusa de las denominadas técnicas narrativas modernas, que a veces terminan confundiendo y desalentando al lector (cuando no cumplen su rol por estar mal aplicadas); sino que, por el contrario, trata de mantener un diálogo constante con los hipotéticos lectores, narrando y describiendo de manera directa.