El ensayo Viaje a través de la piel. Travesía por la obra de Oswaldo Reynoso es, como su nombre lo indica, un recorrido por la obra de Oswaldo Reynoso. Está dividido, a modo de estaciones, en seis capítulos. En el primero (Luzbel: El inicio de la travesía), se va analizan los motivos e influencias que, a temprana edad, perfilaron la poética de la narrativa reynosiana. En el segundo (Los inocentes: El poder de la mirada), se advierte que Reynoso experimenta con la prosa impresionista de Martín Adán y la técnica del calidoscopio de Juan Ramón Jiménez, para adoptar una nueva forma de mirar y narrar la sociedad peruana. En el tercero (En octubre no hay milagros: La otra cara del Paraíso), se analiza la influencia del teatro de Sartre y del método de Jean Genet, empleado en la obra El balcón, para diseccionar la sociedad y analizar sus estamentos. En el cuarto (El escarabajo y el hombre: Los hijos de Sísifo), se descubre la influencia de Camus y el existencialismo para construir una obra sobre una grupo de jóvenes entregados al desenfreno y la disipación de una vida sin sentido. En el quinto (Los eunucos inmortales: En busca del sueño perdido), se estudia la influencia de Proust en una obra que recurre a los recuerdos y trasunta el desencanto por la experiencia socialista china y el deseo del viaje de retorno. El sexto (El goce de la piel: Regreso al fondo de sí mismo) está marcado por la influencia, en Reynoso, de la obra de Thomas Mann, el cine de Visconti y la música de Mahler, los cuales, a la postre, lo van a llevar de regreso a la fuente primera de su búsqueda estética (la experiencia de descubrimiento sexual); de ese modo, se cierra un círculo, se produce el retorno al punto de partida. Esta misma pulsión de retorno va a marcar sus obras posteriores: En busca de la sonrisa encontrada, Arequipa, lámpara incandescente y Capricho en azul. Como ya se ha dicho, en este suerte de recorrido, se buscan las fuentes e influencias, las variadas interpretaciones, recurriendo a distintas corrientes de crítica y métodos de interpretación filológica, y, del mismo modo, aplicando el pensamiento transversal, a fin de recurrir a diversas disciplinas del conocimiento y el arte para profundizar los análisis y ampliar las explicaciones.