ISBN 978-612-4433-52-8

Reseña

Afectado por un síndrome extraño, el pintor Matías, cuando era niño, creía que era un pez, un ave y, en ocasiones, el marido de su mamá. Años después, supuestamente curado, irá en búsqueda del Dr. Tristán, el hombre que lo trató, a quien imagina en un cuadro que ha soñado: ¿sucede el cuadro en el sueño o el sueño en el cuadro? Entre matices y brumas, cromatismos indefinidos, Matías se perderá en El Silencio, donde encontrará a un drogadicto borroso, un visitante inoportuno, una casera opaca y a Violeta, cuyo nombre es un color con más de un tono.


“Comida de Gusanos es un pozo profundo del subconsciente del cual vamos saliendo en sentido inverso. Se habla mucho de la pintura como terapia, pero esta novela parece decirnos que el arte es una enfermedad”.

Hans Alejandro Herrera Núñez
Periodista cultural y consultor editorial

“Un libro potente y fluido. Una pluma auténtica. Un sueño narrativo que no se puede dejar de leer. Si un cuadro de Van Gogh fuera una novela, sería esta”.

Kareen Spano Klein
Escritora y agente literario