Diario de los suburbios es un poemario intenso y complejo, que recorre calles cercanas a nosotros, cariños olvidados y suertes oscuras. Sus personajes son seres marginales, niños cuya voz se levanta imprecatoria, destinos destruidos antes de ser levantados: una imagen de nuestro país fragmentado y sangrante. En esta poesía late el cariño por la gente humilde que mira el mundo con dolor y emoción, con rabia y optimismo; una suerte de sentimiento contradictorio donde el mundo es un espejo de amor, violencia y esperanza.