Para la industria farmacéutica, el uso de biosensores desempeña un rol importante en el descubrimiento de nuevos fármacos. A pesar de la extraordinaria capacidad de los métodos convencionales para detectar una gran cantidad de sustancias, los biosensores pueden generar información de alta calidad porque detectan ligandos potenciales que interactúan con receptores celulares específicos y obtienen información sobre su actividad a través de la afinidad y la cinética. Estos datos que los sensores recolectan, procesan, descifran y muestran para que los científicos los interpreten y generen resultados y les permite, a su vez, efectuar un plan de acción para que desde ese punto de partida y junto con otras herramientas creen información sobre el mecanismo de interacción y propiedades farmacocinéticas describiendo su absorción, distribución, metabolismo, excreción y toxicidad
En el presente libro se aborda el uso de los biosensores como metodología para la evolución de la industria farmacéutica, lo que no solo beneficia al mundo médico sino a todas las personas que padecen diversas enfermedades puede decirse que la humanidad está a solo unos cuantos pasos de crear tecnología práctica, capaz y portátil que dé la posibilidad de dar diagnósticos mucho más precisos, acertados, eficaces y rápidos que mejoren, por completo, la calidad de cientos de personas.