La novela de Doris Castillo, la cual tiene una inmensa fuerza creadora, nos cuenta la historia de Antonio, su esposa y su hija pequeña, quienes, de la noche a la mañana, se ven atrapados en el laberinto de la injusticia, nada común en un país donde las instituciones solo sirven a los que pueden ser invitados a la fiesta del poder. Con una prosa sutilmente lírica y llena de metáforas, los diferentes capítulos van sumergiendo al lector en el hoyo de las decepciones, en la previsible destrucción de su familia, en el núcleo de la impotencia, en la subjetividad de todas las leyes.
Alexandre Coello de la Rosa