Estoy convencido que los seres humanos estamos dotados de una divinidad mágica, que solo nosotros podemos manifestar y que ninguna máquina, tecnología o inteligencia artificial, podrá reemplazar. Somos esencia de Dios, únicos e irrepetibles y como tal, podemos expresar emociones, verdades y comprensión hasta llegar al amor.
No llevemos al destierro un poema, un verso, una flor, una palabra hermosa y todas aquellas expresiones que nos diferencian de la tecnología abrumadora que nos tiene cada día más alejados del amor verdadero.
La tecnología es maravillosa, pero no olvides que el amor es uno y somos nosotros los llamados a mantenerlo vivo.
Te invito a leer mi libro “Porque somos uno. Poemas de amor”, como un recordatorio de la belleza que todos llevamos dentro y que podemos compartir con los seres amados.
Cali (Colombia) 9 marzo 1966-
Ingeniero Civil