En una noche calurosa, Tristán no puede dormir por las preocupaciones. Se acerca a la ventana en busca de un poco de aire fresco, pero lo que encuentra lo saca totalmente de sus cavilaciones. Un vecino del edificio de enfrente parece haber olvidado sus llaves. Sin embargo, esto no es un problema para él, pues trepa a un árbol cercano, da un salto prodigioso hacia el edificio y escala la pared con una habilidad sorprendente. ¿Quién es ese hombre y cómo es capaz de hacer eso? Desde ese momento, las vidas de Tristán y su esposa Isolda se entrecruzarán con la del misterioso señor NN y unos extraños sucesos saldrán a la luz. En esta novela, que continúa la historia de La zona invisible, el suspenso acompaña temas trascendentales como la muerte y la búsqueda de nuestros orígenes.
Escritor y crítico