ISBN 978-612-5031-99-0

Reseña

El pensamiento crítico es, no excluyentemente, el objetivo inicial, intermedio, consecuente e interminable en el ser humano que la educación perfila y enfoca para distinguirnos como especie en la realidad “Requiere de ciudadanos formados con una mentalidad crítica,
abierta y flexible ante los cambios. Enfrentar esos retos requiere de sistemas educativos que destaquen por la aplicación de métodos de enseñanza” (Moreno - Pinado, 2017, p. 54).
La Universidad Católica de Santa María, en su devenir histórico, se ha consolidado como una institución equilibrada en principios y valores insustituibles que están garantizados en sesenta y dos años. Forma “Profesionales e investigadores líderes con principios éticos y
humanísticos, en su compromiso con el desarrollo de la ciencia, tecnología, innovación y con la mejora de la calidad de vida en la sociedad” (UCSM, 2023). Su apertura cultural, política y económica la ponderan como un actor social de sostenida participación cuyo liderazgo está en construcción.
Por eso su mirada universitaria es fiel a la misma esencia semántica de la expresión: la UCSM es intrínseca y extrínsecamente libre, democrática y responsable.
En ese trayecto encuentra experiencias educativas horizontales, verticales y transversales en las que el talento intelectual se expresa en su mejor magnitud.
Así surge el Convenio que Nuestra Universidad suscribió con el Colegio Peruano Alemán Max Uhle. Una aproximación en la que se estrechan los esfuerzos, se reconocen los aportes y se meritúan las perspectivas.
Es inevitable mencionar mi doble condición en la UCSM y el CMU: en la primera como docente y en la segunda como excoordinadora de investigación del Bachillerato Internacional (IB). En ese estado reparé que ambas organizaciones debían integrarse en un solo esfuerzo: la creación intelectual. Consideré que la Universidad aportaría su prestigio académico a las monografías y ensayos de estudiantes embarcados en el IB.
El Bachillerato Internacional del Colegio Max Uhle es un nivel de formación exigente, riguroso, que demanda de los estudiantes diversas habilidades: Comunicación, Autogestión, Pensamiento, Sociales y de Investigación, a esta última le dedicaré unos párrafos ya que desde los primeros años del Bachillerato Internacional del colegio pude ser testigo de los esfuerzos realizados por la institución, los padres de familia, los estudiantes, profesores, asesores y la coordinación de investigación en consolidar un Diploma que manifieste el cumplimiento del perfil: Indagadores, Conocedores, Razonadores, Comunicadores, Íntegros, de
Mentalidad abierta, Solidarios, Audaces, Equilibrados y Reflexivos.
En UCSM apostamos por la investigación
El proceso inicia con la reflexión, la selección del área de investigación, se conversa sobre sus preferencias, sus inclinaciones intelectuales, comienza la indagación, los temas recurrentes, las áreas de más probabilidades para llegar a la pregunta, la interrogante que guiará
todo su proceso y que a lo largo del saber-hacer, puede sufrir modificaciones, se buscan las posibilidades, se acopia el corpus, continua la selección de los indicados, la preocupación por encontrar el inédito, el que no se ha hecho.
Con la pregunta de investigación el supervisor orienta, coordina plazos, establece cronogramas, registra reflexiones se delimitan las temáticas, se mejora la pregunta inicial nace en ellos su afán de investigador, su ambición por el éxito “Desde que comencé el Bachillerato
Internacional, el trabajo que más me llamó la atención fue la Monografía. No solo porque te posibilita investigar en una asignatura de tu preferencia, sino también porque te permite elegir un tema de tu agrado” (Polar, 2021).
Se consolida el proyecto, la desesperación por la aprobación, las conversaciones
constantes, la redacción del marco teórico, las visitas a las bibliotecas. Corregir, perfeccionar,
revisiones constantes “la satisfacción de la mejora” que solo un estudiante del IB comprende
“Cada aspecto de este trabajo me apasiona, lo cual me incentiva a seguir adelante con mucha
ilusión y esfuerzo, ya que una vez que se empieza a escribir es muy difícil parar” (Torres,
2019).
Después de la teoría, se estructura el análisis, las palabras pertinentes, descartar y
aumentar, comprobar la hipótesis, corregir la pregunta para finalmente llegar a las conclusiones. Subsanar, pulir y lograr pasar la evaluación detallada de la coordinación para finalmente
recibir la felicitación “La monografía me otorgó una nueva manera para poder reflexionar
acerca de información adquirida por mis propios medios y a entender la importancia de la
investigación en todo sentido” (Zárate, 2019).
Las historias siempre tienen su encanto, y la del convenio entre la UCSM y el CMU
posee la suya. Debo destacar de ella, como testigo cómplice, la inmediata y cordial apertura de
la casa santamariana, a través del Dr. Federico Rosado Zavala, Jefe del Departamento Académico de Estudios Generales. Supuse, erradamente, que encontraría ese vistazo de displicencia,
si bien un centro universitario es la cumbre del conocimiento, por eso advertí gratitud, fusión
y unidad; ratifico: la Universidad Católica de Arequipa es garantía de libertad de expresión.
Los artículos del libro son un recorrido al pasado, pero también al futuro: los autores
seguramente serán esas buenas personas por las que apostamos en el colegio y la universidad, aquí está el testimonio; ellas y ellos, ahora, lo siguen siendo, cuando vean este libro
recordarán de la apuesta que hicimos, la promesa, la esperanza que siempre guardamos en la
educación como un sueño constante al que no renunciaremos, al que estamos comprometidos.
No tengo la menor duda que esta publicación transitará bibliotecas particulares e institucionales, retinas jóvenes y adultas; que será fuente de consulta e inspiración, de creatividad
y transpiración; que los autores se sentirán satisfechos y los lectores, también.
Agradezco a la Autoridad de la UCSM, por la confianza, su actitud que cada día compruebo de involucrarse en nuevos retos, de no rehuir a los desafíos, de configurar un estilo que
le ha generado un espacio probo y probado, que no escatima en impulsos y proyectos.
Me permito, también, expresar mi despedida del CMU, que me acogió durante diecisiete años, en el que me forjé como maestra y consolidé mi preparación académica, al igual
que mis alumnos del Bachillerato, asumo retos sin temor al fracaso ya que aprendí de ellos la
tenacidad por ser, inquebrantablemente, honestos e inteligentes.
Los finales siempre son tristes, aunque atesoran lo que ya estamos pensando incluso
antes que estos lleguen; en un acto de fe, quiero creer que el próximo año veremos otro libro
como este, que nos emocionaremos, que pensaremos que estamos cumpliendo que, por eso,
nunca habrá final.