Miguelina Acosta Cárdenas nació el 26 de noviembre de 1887 en Yurimaguas y fue hija del matrimonio entre Miguel Acosta Sánchez y Grimanesa Cárdenas Montalván. Esta familia se dedicó a la exportación e importación de productos en el contexto del caucho. Dicha condición
hizo posible que Miguelina resida y estudie educación básica por un tiempo en Europa, acompañando a su madre a los tratamientos médicos. Desde muy niña conoció la realidad de la Amazonía y de la explotación de las comunidades indígenas y en su experiencia europea afirmó su compromiso social motivada por las reformas sociales de ese continente.
En sus primeros escritos, en el Deber Pro-Indígena y El Tiempo, denunciaba el abandono del gobierno de turno que dejaba a su suerte el destino de esta región a merced de la corrupción política y la explotación empresarial. Su prosa aguda y crítica fue una carta de presentación de
su posterior activismo social que supo ser valorado, en un primer momento, por Dora Mayer y Pedro Zulen, y posteriormente por José Carlos Mariátegui como se constata en los 7 ensayos de la interpretación de la realidad peruana. Esto demuestra que Miguelina estaba un paso adelante sobre la interpretación de la realidad loretana y, así, abría un pertinente debate sobre un proyecto nacional a través de la integración de la Amazonía.