El diario de Izumi Shikibu
Izumi experimentó varias experiencias amorosas en su vida. Dos casos destacados fueron sus amores morganáticos, con príncipes imperiales, los que fueran tan intensos que les costaron la vida. Las consecuencias tuvieron máximas repercusiones en la sociedad. No es difícil imaginar cuán severas miradas recayeron sobre ella. El poderoso Fujiwara no Michinaga la juzgó de «apasionada mujer fatal».
En la época Heian, incumbió exclusivamente al hombre el hecho de ser «sujeto principal del acto de amor». Sin embargo, Izumi Shikibu se comportaba igual que un hombre, al mantenerse como «sujeto principal del acto de amor» y enlazar el alma de sus amantes a ella, como un imán, y era ella misma quien entraba en acción.
El diario de Izumi Shikibu compone un registro de la verdad de aquellos días y años resplandecientes, pero llenos de sufrimientos debido a los apasionados amores que nadie bendijera jamás, no obstante la autenticidad del amor de la dama en cada caso.
El diario de Sanuki no Suke
Es el único diario que escribiera una Naishi, cuyo cargo fuera principalmente prestar servicios cerca del emperador. De hecho, desempeñó el papel de su más próxima asistenta, procurando las máximas atenciones en todos los aspectos de la vida diaria del soberano.
La razón de la singularidad de esta entre las obras literarias de las damas Heian, es que la autora se hallaba unida al emperador por un profundo afecto, lo que resultara en la composición de «un testimonio registrado por escrito, que captara la verdadera imagen del soberano a punto de morir».
Es imaginable la tragedia que padeciera causada por su profundo amor, pero había sido capaz de describir la lucha contra la enfermedad hasta la muerte del monarca, los recuerdos alegres de su vida y el afecto personal de un soberano de la Edad Antigua, algo que no es posible vislumbrar en los diarios cortesanos de los caballeros. Este impar testimonio de Fujiwara no Nagako es de excepcional valor en la historia de la literatura universal.