Los auténticos líderes piensan en logros gigantes, aspiran al éxito y la gloria. El poder del pensamiento positivo implica mantener una actitud mental firme y convencida de que se pueden alcanzar las metas propuestas, entrenando la mente para superar los obstáculos y convertir lo negativo en positivo. Confianza, fe en uno mismo, son motores esenciales del éxito, elementos que impulsan a seguir adelante con disciplina y determinación; precisamente eso es lo que aborda el presente texto.