Denominamos Proyectos de Desarrollo –PD– a los proyectos de todos los sectores socioeconómicos del país, obviando las clasificaciones, en tanto –de diversas formas– contribuyen al desarrollo, y metodológicamente pueden ser tratados de forma similar diferenciando su tipo, magnitud y complejidad.
La cantidad y calidad de los PD determinan el nivel del desarrollo del ámbito geográfico al que corresponden.
A su vez, la calidad es intrínseca a la gestión; haciendo hincapié que con este término debemos comprender las cuatro fases de los proyectos: Diseño, Ejecución, Operación-mantenimiento y Cierre-restauración; en una sucesión ordenada, metodológica, de interrelación, como se podrá
apreciar.
Nuestro subdesarrollo se evidencia en los PD estatales e incluso privados, con una gestión inconexa entre las fases e incompleta o deficiente en cada una de estas. Los primeros se caracterizan –con pocas excepciones– por la improvisación en lo técnico y actores poco
capacitados o que privilegian la obtención de beneficios muchas veces indebidos. Empiezan con diseños deficientes que devienen en su ejecución con fuertes sobrecostos y demoras desmedidas,
concluyendo en proyectos que operan con limitaciones; es el ciclo que se repite indefinidamente y no se avizoran cambios para mejorar. En consecuencia, malgastamos el presupuesto nacional, desperdiciamos tiempo precioso, dejamos pasar oportunidades que nos brindan períodos de bonanza, y mantenemos una tecnología anacrónica.
El objetivo de este trabajo es plantear una gestión metodológica para que sea difundida entre las entidades del Estado y los actores privados, analizarla y aplicarla como instrumento para superar la problemática actual, que resumimos y ejemplificamos ampliamente.
El presente trabajo podrá servir no solo a los profesionales que participan en la Gestión de los PD (ingenieros, economistas, sociólogos, arquitectos), sino también a los profesionales y ciudadanos en general que se interesen en saber de esta tarea, poco conocida pero fundamental en toda sociedad; y si se lo proponen, investigar con mayor acuciosidad sobre los aspectos que más les concierne o preocupa, para poder vigilar y hacer seguimiento. Así sus aportes se enriquecerán.