La escuela y el árbol de manzanas conversan en las noches. Ella le cuenta de infinidad de alumnos que han pasado por sus aulas, y él, el deseo de volar y conocer otros lugares. A fines del otoño los dos, como pudieron, llegaron a rescatar a una golondrina mal herida. Ella para recompensarlos les describe los lugares que ha conocido. Sin embargo, los años pasaron y la tecnología ha avanzado. La escuela será destruida. El árbol de manzanas talado y solo la golondrina podrá defender a sus amigos de veinte trabajadores.