El autor tuvo habilidades sobresalientes para las artes plásticas desde temprana edad. Sin embargo -a pesar que el año 1986 ingresó a la Escuela Nacional de Bellas Artes del Perú con el primer puesto, decidió estudiar medicina en la Universidad Peruana Cayetano Heredia y luego realizar la especialidad de cirugía plástica, estética, y reconstructiva. Como tal, trabajó varios años en un hospital del Estado y en la práctica privada -hasta que un viaje circunstancial a España el 2009 le sirvió para explorar por sí mismo el mundo del arte europeo que había conocido hasta entonces sólo a través de libros. Sus descubrimientos personales hicieron que se cuestionase lo que había aprendido y lo motivaron a buscar más información. Inadvertidamente, este se convirtió en un proceso que terminó cuestionando su propia vida y proponiéndole un nuevo modelo para sí mismo. Pocos meses después publicó el testimonio de esta experiencia, rechazó dos propuestas para dirigir un Banco de Tejidos, y el 2011 renunció a su trabajo como cirujano reconstructivo, y se dedicó casi exclusivamente a pintar.