Ante los treinta y cinco años de existencia de la Comunidad Urbana Autogestionaria de Huaycan -CUAH-, es oportuno que este folleto se vuelva a publicar, en el sentido que es importante y necesario realizar cada cierto tiempo un proceso de memoria -tanto individual como colectivo- y con ello hacer las respectivas evaluaciones y proyecciones de lo que puede ser la comunidad en un futuro. En el caso particular de la CUAH, se trata de la parte final de una etapa de lucha que tiene como objetivo su distritalización, cuya consigna ha sido: Huaycán distrito. Pero esta etapa de lucha no es casualidad o un proceso que surge de la nada, no. La CUAH desde un inicio nace no solo para ser una zona urbana de vivienda como muchas otras, sino como un proyecto social de futuro, de nuevas formas de relacionarse entre sus pobladores, el intento de cambiar la forma de vivir construyendo comunidad basada en la solidaridad. Es entonces importante recordar el papel que tuvo en ello las diferentes organizaciones de pobladores que fueron sumándose, como también las instituciones de la sociedad civil y las Municipalidades de Lima Metropolitana y Ate -gestionadas en ese momento por la izquierda-, las cuales sirvieron de apoyo profesional promoviendo el surgimiento y desarrollo de este modelo alternativo de comunidad urbana popular, que se proyectaría como un modelo alternativo de ciudad.