Política Andina de salud sexual y reproductiva para adolescentes, con énfasis en la prevención del embarazo en la adolescencia, basada en el contexto del ejercicio de los derechos sexuales y reproductivos de las personas, contribuye a la construcción de una subregión que resguarda las oportunidades, para que su población adolescente pueda alcanzar su máximo potencial de desarrollo humano y de bienestar integral, esforzándose por combatir las desigualdades que afectan a aquellos adolescentes en situación de mayor vulnerabilidad.