Resulta difícil recoger el guante que he lanzado y no reaccionar con desaliento. Sí, a menudo no hemos estado a la altura de los retos éticos y políticos que plantea la promesa republicana delineada por Basadre, pero este no es un momento para rendirse. Nuestra sociedad civil todavía puede convertirse en el locus de una ciudadanía activa que despierta y está dispuesta a luchar por la democracia como una forma de existir digna de ser elegida. En las páginas que siguen, el lector podrá encontrar relatos y razones para comprometerse con este proyecto de vida pública basado en el cultivo de la agencia política. El presente libro examina las ocasiones en las cuales, durante los últimos años, hemos fracasado en hacer frente a la cultura autoritaria que continúa presente en nuestra sociedad, pero también discute las veces en las que nuestra juventud se organizó para combatirla en las calles y consiguió derrotarla. Tales éxitos y fracasos constituyen nuestra hora actual y acaso sientan las bases de un futuro —todavía incierto— que se va dibujando poco a poco ante nuestros ojos.
Gonzalo Gamio