Este libro contiene un conjunto articulado de planteamientos tendiente a superar el capitalismo monopolista imperante a nivel mundial. Las líneas estratégicas expuestas en esta obra se sustentan en una filosofía y política que van en contra del primado de las fuerzas productivas, el cual condujo a los denominados países socialistas al capitalismo de Estado y a la crisis de las izquierdas. En esta óptica, se desarrolla en más profundidad lo relativo a la no-neutralidad de las tecnologías, en particular, de las digitales y virtuales, que son un instrumento de control social y de homogeneización del pensamiento.
Los planteamientos formulados en este libro parten de los intereses de las formaciones sociales periféricas y de las poblaciones más vulnerables. Dentro del marco en cuestión se presenta una concepción de la sociedad opuesta a la visión infraestructura y superestructura por la que abogaban la ortodoxia y buena parte de la no-ortodoxia. El enfoque seguido en este libro otorga gran importancia a la cultura en su sentido más amplio, lo cual tiene por objetivo luchar contra la potenciación de la fetichización de las mercancías.