Este libro se centra en el fundamento del derecho a no autoincriminarse, destacando su manifestación doble, es decir, entre el derecho a la libre declaración y el derecho a guardar silencio. Por ello, se analiza la normativa procesal penal peruana, contrastándola con la doctrina y la legislación de América Latina y España, además de revisar tratados internacionales de derechos humanos. La importancia de invocar el derecho a no ser obligado o inducir a declarar contra sí mismo durante el curso del proceso penal se sustenta en el rol pasivo que asume el imputado.