Extranjero aquí, mas no en mí es un libro muy personal, pero a la vez universal, que está escrito con mucha humanidad y con la clara intención de llegar al corazón de quien lo lee. Aunque no todo es emoción. A través de sus páginas, Agustina Tocalli-Beller hilvana, con mucha delicadeza, su propia experiencia migratoria con conocimientos teóricos basados en la investigación. De esta manera, les da una base sólida a sus planteamientos y le ofrece al lector un panorama amplio sobre la expatriación.
Lo más interesante de la propuesta de la autora es el cruce con la leCtURA y la esCritURA como espacios que, como ella bien identifica, CURAN. Por eso, nos invita a observar la experiencia de personajes
de la ficción literaria que también han migrado y en cuyas inquietudes, probablemente, nos veamos reflejados. De igual manera, nos propone acercarnos a la escritura como un proceso íntimo que nos ofrece una puerta hacia el autoconocimiento.
El viaje (interior y exterior), la necesidad de pertenencia y conexión, o las preguntas sobre dónde está nuestro hogar son cuestiones tan profundamente humanas que trascienden a la experiencia del
migrante y nos alcanzan a todos.