Dos pueblos aledaños de nuestro Perú mágico que se funden e integran con la actualidad en medio de un caos policial que ya no sorprende. El rock sonando en las emisoras que cantan la hora para darnos cuenta de la simbiosis de las escenas y los personajes. Secuestros, violaciones, lucha de generaciones familiares y —cómo no— varios curas que nos hacen dudar de nuestra existencialidad y de si lo que hacemos está bien o necesita reforzarse. Muchas preguntas por resolver en medio de la adolescencia y la madurez; pero siempre girando hacia la justicia y hacia la naturaleza humana. Una novela digna de estar en las bibliotecas peruanas y en las del extranjero por la definición perfecta y la claridad sobre nuestra cultura.
Londres, 1935-