La fundación de la ciudad de Chucuito por el Mallku de la dinastía de Martín Cari, a la fecha son poco conocidos. Un pueblo que no conoce de dónde procede, cómo se ha ido estructurando su organización con el correr de los años, las vicisitudes por las que ha pasado y los acontecimientos que influyeron decisivamente en su desarrollo, merecen ser recordados e informados a la población Lupaca.
El estudio de nuestra historia de fundación, se instaura precisamente en estas consideraciones. Entiendo que la historia no es pasatiempo de personas desocupadas para hurgar el pasado o para satisfacción de su vana curiosidad. Si el pasado no interesara para el presente y sirviera para el porvenir, bien podría quedar enterrado y olvidado para siempre.
Vivimos del ayer de los lupacas, más que del presente. Somos la resultante de generaciones que actuaron antes que nosotros y de fuerzas que obraron activamente en épocas remotas. Ni el hoy se puede comprender sin conocer el ayer, ni el futuro preparar adecuadamente sin medir las fuerzas que influyeron en la evolución de nuestra sociedad regional o local. El presente no se formó de manera espontánea, es el resultado de hechos históricos reales y verdaderos, ocurridos quinientos años antes de Cristo en el caso de Chucuito, en consecuencia, si no sabemos a dónde vamos, debemos saber de dónde venimos mínimamente.
En este marco nos atrevemos a presentar el auto popular la FUNDACIÓN DE LA CIIUDAD DE CHUCUITO POR EL MALLKU MARTÍN CARI Y LA FIESTA DE MARAT'AQA, que viene a ser el primero una fuerza que cae avasallada por el tiempo y el peso de la historia, y una energía que florece esplendorosa en medio de muchos sitios arqueológicos del distrito Chucuito dormida siglos, obra de los lupacas arquitectos. Esta es la razón de haber dedicado en este punto el pasado de nuestro pueblo. Y hay otra razón más poderosa: pensamos que toda la fuerza espiritual diluida en los monumentos históricos, es obra de nuestra raza humana aymara, como: Inca Uyo, Sillustani, Molloco, Pukara, Tiwanaku y Machu Picchu entre otros, junto a ello vive mi AJAYU, sobre todo Chucuito.
Los conquistadores no han infiltrado en nuestro espíritu, sino sus costumbres, errores y sus defectos. Los invasores no vinieron sino a destruir nuestra civilización Lupaca y otros, para sacar de sus despojos todo el oro y la plata y llevárselo a la península ibérica. Los colonizadores profanaron nuestras tumbas sagradas que guardaban en sus cenizas la tradición de siglos. Todos los sitios arqueológicos antes de la conquista fueron corroídos, deleznados por el tiempo o por los agentes atmosféricos, pero jamás violados por el indio supersticioso Aymara y Quechua.
Por estas razones muchos espíritus tratarán de paradójica la plasmación de esta modesta obra que fortalece y coadyuva al texto Historia de Chucuito titulado: CHUCUITO RAÍZ Y FUTURO, y existen grandes verdades en este trabajo, que hicieron los Mallkus de la región Lupaca. Porque además de ser el exponente de nuestros valores intelectuales, morales, físicos, materiales, entre otros, es también el exponente de las esperanzas de los hijos de Chucuito. Pueden existir algunas deficiencias, vacíos históricos que llenar, datos incompletos. Pero se ha bebidos en las fuentes originales y de allí hemos extraído documentos inéditos para lanzarlos a nuestro pueblo Qalacampana. Son datos históricos llenos de verdad, el lago azul mágico, las montañas apacibles, manto verde de la primavera y el calor sofocante del verano, han sido también nuestras mejores obras de consulta, así como las tradiciones culturales que superviven en nuestro espacio vital, y es en este último mensaje está incluido el tema de la Fiesta de Marat'aqa que viene a ser el retorno del Dios Sol, después de una época esplendorosa.
La obra es revisada por el historiador Néstor Pilco Contreras, antropólogo Dionisio Condori Cruz y el magister Joseph J. Merma Ramos.