«Después del oasis» evoca aquellos encuentros y desencuentros cotidianos, propios de la vida humana ante experiencias que desbordan la existencia. La música poética, —voz ‘sui generis’ del autor es «polisonora» que abarca diversos paisajes y escenarios descritos desde la libertad en la búsqueda constante de la felicidad y edificación del Amor como principio fundante que irradia los acontecimientos más altruistas del ser humano en la añoranza y protesta por un país con igualdad de oportunidades: «Somos el rastro inconcluso/ el camino de varias partidas/ el Perú, la lucha de clases/ en busca de justicia/ —de aquel niño sentado en los rieles del tren—.
Susana Zabarburú Villacrez.