La medicina hiperbárica encuentra sus antecedentes más remotos en la época precristiana, sin embargo, recién a mediados del siglo XVII es que empieza el desarrollo de la ciencia aplicada, sucediéndose una serie de hechos que encuentran recién tres siglos después, efectos en trabajos clínicos, identificándose los conceptos de cámara hiperbárica u oxígeno hiperbárico.