La historia de la Filosofía es un constante devenir, en el cual el hombre intenta aproximarse a respuestas fundamentales de preguntas cuyo objeto ha sobrepasado las barreras espaciales y temporales, realidades de las cuales el hombre no puede escapar.
Quien se adentre en una especialización en historia de la Filosofía o en la historia de la Educación no puede darse el lujo de dejar escapar al desarrollo de este intento, de esta búsqueda permanente, en su propia región o contexto local, medio íntimo y privilegiado que le brindará la oportunidad de enraizar aquello que de importante puede poseer la Filosofía, con aquello de importante que la misma ya dejó en su ambiente, tradición o cultura.