Desde la aparición del hombre este ha efectuado acciones sobre la naturaleza modificando, construyendo o adaptando el medio natural para resolver problemas de su existencia. En un principio el diseño y la ejecución estaban regidos únicamente por condicionantes de viabilidad y factibilidad técnica pero posteriormente la evolución, el desarrollo del cálculo y el conocimiento de materiales ampliaron en la dimensión económica las consideraciones del diseño. En el mundo actual las repercusiones que las acciones humanas tienen sobre el ambiente han obligado, a través de normativas en los países desarrollados esencialmente, a la inclusión de la evaluación ambiental como paso previo a la concesión de autorizaciones para ejecución de determinados tipos de proyectos.