El terrorismo es uno de los fenómenos de violencia que cobró la vida de miles de peruanos y que aún sigue vigente al dia de hoy en las zonas del VRAEM con tanta vesania. Abimael Guzmán y el Comité Central de Sendero Luminoso orquestó los más salvajes atentados y masacres dejando vacíos de poder y caseríos en orfandad con la presencia de mandos subversivos que mancharon de sangre la región de Ayacucho, así como asesinatos selectivos, los niños bomba y atentados coches bomba.
Desde 1992 hasta la actualidad, Sendero Luminoso ha seguido perpetrando feroces crímenes aun cuando el grupo terrorista se fraccionó: el Frente Huallaga con el camarada Artemio y el VRAEM con el camarada Feliciano, cuadrilla que sigue operando en dichas regiones al mando del Víctor Quispe Palomino y el Militarizado Partido Comunista del Perú. Por otro lado, así como se ha combatido a la subversión desde sus inicios, hubo fuerzas del orden que, así como dieron su vida por la pacificación, otros fueron al margen de la ley perpetrando hechos execrables.
Sebastián Saavedra nos presenta una importante investigación escrita con gran talento narrativo que permite al lector entender los hechos violentos para que nunca más se vuelvan a repetir.