Los procesos de globalización en el mundo moderno se caracterizan por la orientación de las actividades económicas, políticas y culturales de los países hacia la integración y unificación internacional: la formación de una sola comunidad mundial con objetivos, acciones y resultados comunes. La calidad de los servicios educativos se ve afectada por los cambios en la ciencia, la tecnología y la economía. La complejidad de los problemas que deben resolver los gestores educativos exige emplear un enfoque interdisciplinario que permita ayudar a las instituciones a crear un entorno educativo colaborativo, lo que conducirá a un entorno de conocimiento mejorado de la organización educativa.
El mejoramiento de la educación debe considerar principalmente el cambio de paradigma del rol del docente en la escuela. Ante los rápidos cambios de la sociedad actual, es necesario priorizar la visión de las políticas educativas establecidas por los entes reguladores, pero principalmente aquellas que contemplen un cambio profundo en la práctica docente. El desempeño docente y su revalorización son importantes y esenciales para estructurar el cambio en cualquier política educativa. En consecuencia, se considera como una directriz educativa relevante la reformulación de políticas públicas en el campo educativo para mejorar el aprendizaje de los estudiantes en la escuela, además de que establezcan criterios claros en los procesos de preparación para el aprendizaje de los estudiantes y los limiten a la evaluación del desempeño docente, siendo los nuevos retos.
El rol del docente en la escuela ha evolucionado y se deben establecer procesos de enseñanza-aprendizaje pertinentes, para su mejoramiento, mediante estrategias de gestión del desempeño que brinden apoyo para el desarrollo profesional y retroalimentación a partir de una evaluación de su trabajo, y haciendo énfasis en el reconocimiento implícito de la importancia de la enseñanza para elevar la calidad de la educación.