Hans Horkheimer, director del Instituto Arqueológico de la Universidad
Nacional de Trujillo, dice que, en enero de 1943, un buscador de tesoros
(Neyra), denunció en el Patronato Departamental de Arqueología, el
descubrimiento de unos relieves en una huaca denominada “ciempiés”, en
la Esperanza, Trujillo, La Libertad.
Entre 1948 y 1950, el norteamericano Richard Paúl Schaedel, excava en
este sitio denominado como “Huaca El Dragón”. Posteriormente, Francisco
Iriarte Brenner (1963-1965) interviene en todo este monumento llamado
“Huaca Arco Iris”, por encargo del Patronato de Arqueología. A partir de
1970, personal del INC – La Libertad (hoy DDC-LL), continua con la
conservación y restauración de este sitio arqueológico.
Esta publicación, plasma los acontecimientos relacionados a este templo
que habría correspondido al génisis de la cultura Chimú, por las evidencias
Wari ahí encontradas.
Esta obra reseña el proceso de intervención, el aspecto arquitectónico,
material y técnica de construcción usada en la edificación del monumento.
Describe y analiza sus manifestaciones artísticas tales como frisos, grafitis,
tallas de madera, textilería, metales y cerámica.
Al final, se integra como anexos, algunos informes de relevancia no
publicados relacionados al edificio, y a la historia de la conservación del
patrimonio cultural edificado realizado en la ciudad de Trujillo del Perú.