Como maestro asumimos que el desarrollo de las asignaturas debe de traducirse en un producto, es decir, que los actores de la educación a nivel de posgrado produzcan trabajos académicos, los cuales deben ser difundidos. En ese sentido, los autores tomaron esta decisión de poder difundir, el cual no ha sido una tarea fácil, sino es gracias al aporte y dedicación de maestros contagiados e inspirados en la investigación y la publicación quienes pusieron sus energías, sobre todo experiencia y pasión para que salga a la luz. En el fondo son autobiografías con distintos matices y títulos, cuyos contenidos se entretejen desde la riqueza de las diversidades de las lenguas quechua y aimara. Hay que advertir que la identidad mal asumida tiene doble rasero y direcciona hacia el fundamentalismo y egocentrismo.
(Vicente Alanoca Arocutipa)